Rumores apuntan a que un atormentado y largo periodo de desarrollo, aderezado con subcontratistas al por mayor, es el motivo del retraso de Halo Infinite.
Según reporta Thurrott, quien asegura haber hablado con distintas fuentes dentro del equipo de desarrollo de 343 Industries en el intento de descifrar cómo y por qué es que se retrasó Halo Infinite, título que muchos creían estaría listo para cuando se decidiera estrenar el nuevo Xbox.
De acuerdo a estas fuentes, Infinite fue creado con el propósito de reimaginar los conceptos principales de la serie además de que se estaría desarrollando al mismo tiempo el motor gráfico que utilizaría. Todo esto en un esfuerzo de que el juego pudiera aprovechar las nuevas tecnologías que traería consigo el Xbox Series X.
Para llegar a esta meta se subcontrataron varios studios para apoyar en la labor de desarrollar el juego. Esta práctica no es extraña ni mucho menos, lo que sí es algo fuera de lo común es que la proporción del trabajo que se hacía de forma externa es bastante elevado para estándares de otros juegos que ha intentado esta estrategia.
Como es normal teniendo tantos equipos diferentes trabajando en un mismo proyecto, las diferencias iban a surgir en algún momento, diferencias que habrían llevado a la renuncia a Tim Longo, el primer director del juego, en Agosto de 2019 y un par de meses después a su sucesora, Mary Olson.
En cuanto a los comentarios de Phil Spencer hace unos días de que se planeaba segmentar el juego de forma episódica en lugar de retrasarlo, las fuentes que platicaron con Thurrott aseguran que esos planes llevan mucho tiempo rondando a Halo Infinite, más o menos desde finales de 2019.