Por si la reputación de Randy Pitchford necesitara algo de ayuda, un nuevo escándalo sale de Gearbox.
A la hora de pagar sueldos Gearbox es algo peculiar, pues ofrece un sueldo por debajo de la media dentro de la industria, pero ofrece incentivos que pueden resultar en jugosos bonos cada trimestre fiscal dependiendo de las ganancias totales en la empresa.
Esto ha hecho que la cultura dentro del desarrollador dependa mucho de estos bonos y con las expectativas de ventas de Borderlands 3, que según palabras de Strauss Zelnick, Presidente Operativo de su publisher 2K, se perfila para ser el juego mejor vendido de la serie, muchos creyeron que esto significaría una bonanza económica como hacía años no se veían en la compañía.
Para su desgracia, esto no será así, y aunque las ventas del título más reciente sean tan buenos, los bonos son menores de los esperados.
Un puñado de empleados hablaron de forma anónima con Kotaku revelando que en una junta que se llevó a cabo el día de ayer dentro de las paredes de Gearbox el presidente de la compañía, Randy Pitchford, les comunicó que los incentivos trimestrales ésta vez serán bastante menores que los que se esperaba debido, entre otras cosas, por el crecimiento que ha tenido el desarrollador y el cambio de motores gráficos que se tuvo que hacer a la mitad de periodo de desarrollo del juego.
Otro gran agujero de dinero es que Gearbox y 2K habrían llegado a un acuerdo en el que el desarrollador tendría que pagar la totalidad del presupuesto del juego principal ($95MDD) y el de todo el DLC ($140MDD) antes de empezar a ver ganancias y poderlas repartir entre los trabajadores.
Lo peor es que según estos reportes, Pitchford agregó que quien no estuviera de acuerdo con el sistema de bonos podía renunciar.
Hay que recordar que Gearbox es una empresa privada y que no rinde cuentas sino a su mesa de directivos y, en este caso también, al publisher. Pero esto significa que no hay ningún tipo de declaración de ganancias al público, aunque la compañía declaró en un comentario en respuesta a la publicación del reporte de Kotaku asegurando que las cifras fueron reveladas para miembros de la compañía.
No hace falta decir que a inicios de 2019 hubo una gran polémica entre Randy Pitchford y un exabogado de la compañía que terminó hasta en demanda en la que aparecía un supuesto bono fantasma de $12MDD que habría recibido Pitchford aún en años cuando a la compañía no le había ido también en cuanto a ventas.
Todo esto sin duda tendrá repercusiones internas en al compañía, pues quienes revelaron esta situación esperan que haya un éxodo masivo de trabajadores; pero hacia afuera también puede resultar en algo malo para Gearbox ya que tiene tiempo buscando abrir la compañía al público mediante ventas de acciones; pero luego de polémicas como éstas, los potenciales inversionistas de seguro lo pensarán dos veces antes de inyectar de su dinero en el desarrollador.