Hace unos días Jason Schrier, de Kotaku, describió que la próxima consola de sony no llegaría sino hasta 2020 cuando muy pronto. Hoy otra publicación da un paso adelante y revela algunos detalles interesantes.
Aunque todo se basa en especulación de lo que los genios de Digital Foundry poseen en sus endemoniados cerebros, la información que revelaron en un reciente video -que podrán ver al final de esta nota- es muy interesante. Es vital aclarar que nada de lo que dicen debe de tomarse como una certeza completa, sino más que nada como un vistazo a lo que bien podrían ser las próximas consolas de Sony y Microsoft.
Primero que nada explican que la fecha en que siendo realistas podríamos ver estas consolas en el mercado serían en 2019 cuando muy pronto, esto es debido a que hay ciertas variables que deben de cumplirse para poder tener una consola que presente un salto generacional perceptible y para que esto se cumpla deben pasar algunas cosas en específico.
Aclaran que, según sus estimaciones, las nuevas arquitecturas de manufacturación de microprocesadores no se darán sino hasta finales de este año y, según ciertos acuerdos contractuales, serían monopolizadas primero por compañías telefónicas, como Huawei. Dejando de lado a Son y y Microsoft hasta, en teoría, mediados del año próximo. Otro componente que debe esperarse sea actualizado para esto es la memoria RAM y esperan que las memorias GDDR6 comiencen a fabricarse para mediados o finales de este año. Esto nos deja una fecha, cuando muy pronto y según sus estimaciones, de finales de 2019.
Ahora bien, ¿cómo serán las próximas consolas? esperan ellos que tanto Sony como Microsoft repitan o se asemejen suficiente a lo que actualmente tienen en el PlayStation 4 y Xbox One: un chip gráfico y de proceso en un mismo chip y que sea de AMD. Esto ayudaría a que la transición a la nueva generación no deje sin compatibilidad las máquinas anteriores.
Hay muchos detalles que, hablando de meses e incluso años en el futuro, pueden cambiar, pero las estimaciones de Digital Foundry son que lo menos que veremos en estas consolas sería un microprocesador basado en RYZEN 7 de AMD. Lo cual tendríaun impacto notable en la capacidad de las consolas para realizar mejores simulaciones, físicas e inteligencia artificial compleja.
En cuanto al apartado gráfico, lo más seguro es que el próximo Xbox y PlayStation tengan algo basado en la arquitectura NAVI de AMD, misma que es difícil de prever qué tendrá debido a que el lanzamiento de estos GPU va retrasado y no se sabe a ciencia cierta cómo serán de manera tal que es complicado hacer una estimación de la cual tengan cierto grado de certeza.
Lo que sí se atreven a asegurar es que la arquitectura NAVI debería proveer un puente más fácil de utilizar para lograr retrocompatibilidad con la arquitectura JAGUAR que utilizan actualmente las consolas de Microsoft y Sony.
Si les gustan los números, asegura Digital Foundry que tomando en cuenta las características de sus estimaciones en cuanto a lo que tendrán en las entrañas estas supuestas nuevas consolas, podríamos ver un salto de 6 o hasta 8 veces en cuanto a poder de proceso. Pero hay que ser muy puntuales al explicar que esto es en comparación de las consolas base de PlayStation 4 y Xbox One, no las «mejoradas» Pro y X. En cuanto a teraflops, bien podríamos ver consolas con poder de cómputo combinado de 11 a 15 teraflops.