El día 7 de Octubre es el día más caro del año para los videojugadores, pues saldrán más de cinco juegos «grandes» ese mismo día. Hoy EA y BioWare han anunciado que en vez de estenar Dragon Age: Inquisition en esa fecha, saldrá unos 45 días después, el 18 de Noviembre en América y el 21 del mismo mes en Europa.
Más o menos como sucedió con Battlefield: Hardline, que se retrasó hasta 2015, los muchachos de BioWare se tomarán este tiempo extra para pulir el juego. «Nos asegurarmos que nuestros espacios abiertos sean lo más cautivadores posibles. Reforzaremos el impacto emocional de las decisiones de los héroes y nos aseguraremos de que la experiencia que obtengan sea la mejor, sin importar qué plataforma elijan para disfrutarla.»
¿Quién puede decirle que no a un poquito más de calidad en el juego.