Aunque la versión “definitiva” de Tomb Raider que llegará al Xbox One y PlayStation 4 tendrá muchas mejoras en relación a sus contrapartes de las consolas anteriores e, incluso, algunas diferencias en relación a la versión para PC, habrá un apartado en el que podríamos decir será idéntica a las versiones de PlayStation 3 y Xbox 360: Correrá a 30 cuadros por segundo.
Esto no necesariamente es malo y aunque es decepcionante el saber que no tendrá la fluidez que viene implícita al correr a 60 cuadros por segundo, explica el productor ejecutivo de Tomb Raider, Scott Amos, que el juego tendrá resolución de 1080p en ambas versiones.
Tomb Raider: Definitive Edition estará disponible el 28 de Enero para Xbox One y PlayStation 4.
[vía|Eurogamer]