Después de reportar sus resultados financieros ayer por la noche, THQ perdió casi la mitad del costo de sus acciones en la bolsa estadounidense, llevando a pensar a más de uno en que la compañía podría irse directo al a bancarrota.
Además, el publisher anunció que retrasaría tres de sus juegos que saldrían el año entrante después de la pobre respuesta que lograron obtener con Darksiders 2, este movimiento parece haber puesto nervioso a sus accionistas quienes vendieron baratas las acciones de la compañía, en promedio, bajando 46% el precio de las mismas.
Reuters explica que parte del problema viene como resultado de las pobres ventas del juego de Vigil Games que apenas ha vendido 1.4 millones de unidades de las 2 millones que ocuparían para «quedar tablas» con la inversión hecha en Muerte y su aventura.
Las acciones de THQ se avalúan actualmente a poco más de $1.5 dólares y los analistas ya presagian un futuro bastante malo para el publisher. Michael Pachter, de Wedbus Morgan & Securities, asegura que la compañía anunciará su bancarrota o buscará venderse como resultado de esta pérdida de valor en la bolsa norteamericana, «si la situación financiera de la compañía sigue deteriorándose, esperamos que THQ busque una venta equitativa que permita liquidar a sus accionistas.»
«Los acreedores pedirán renegociar sus términos a descuento; si la compañía no está dispuesta, la bancarrota será una posibilidad. Aún así, si THQ no es capaz de rebajar su costo estructural mediante despidos y un calendario de lanzamiento más fluido para poder mejorar temporalmente sus ganancias, es poco probable que logren volver a menos que comiencen a generar ingresos nuevamente para salir del hoyo.»