Sabemos bien que están hambrientos por más detalles de la quinta entrega de The Elders Scrolls, Skyrim, y para satisfacer su hambruna de RPGs les tenemos unos pocos detalles más que magnificarán al infinito sus ganas de jugar el título.
En primero, las Doomstones sobrevivirán al paso del tiempo y, como en Oblivion, podrán darte buffs parecidos a los que recibes de tu «signo de nacimiento.» de esta forma puedes tomar alguna constelación distinta a la de tu nacimiento para que «te guíe» y, al activarlos, utilizar los beneficios que te ofrecen. Estas piedras preciosas estarán distribuidas por todo el mapa.
Les seré sincero, si hay una cosa que nunca supe utilizar en Oblivion, fue la rueda de speech que salía en las conversaciones. Por fortuna Bethesda se deshará de la maldita cosa y utilizará un sistema más parecido a los juegos de Fallout.
Y si te gustó el sentimiento de «mundo vivo» que había en Red Dead Redemption, el desarrollador promete que las criaturas que se encuentran en el entorno interactuarán entre ellas, por ejemplo, un lobo puede cazar algún conejo.
Además y, para irles dando una idea del nivel de autismo que Skyrim inducirá en sus personas, si quieres sacarle todo lo que tiene para ofrecerte el título, deberás invertirle unas 300 horas de juego.
[vía|NeoGAF]
