El último proyecto de ley de reforma del copyright canadiense fue controvertido, pues este había sido elaborado en secreto. Se proponía una serie de medidas que modernizaban una ley con más de 10 años. Cuando se reveló a luz pública, fué tremendamente vapuleado; ahora el gobierno de ese país no quiere cometer el mismo error y ha puesto en marcha una serie de propuestas para que sea el público el encargado de dar ideas.
El proyecto de ley C-61 presentado hace un año, fué bastante discutido, pues se pretendía establecer medidas multas menores para los internautas que descargasen contenido protegido -aunque permitiendo copias de seguridad de sólo de libros, periódicos, videocasetes y fotografías-
y además apoyaba medidas como el uso del DRM.
Por eso el gobierno no quiere tropezarse dos veces con la misma piedra y ha decidido poner en marcha una iniciativa («Consulta de copyright») que permitirá a cualquier ciudadano u organización canadiense expresar su punto de vista sobre el tema. El gobierno asegura en la web del proyecto que «escuchará las distintas opiniones y con ellas en mente presentará un nuevo proyecto de ley».
En el sitio los usuarios pueden encontrar todo tipo de enlaces con información sobre leyes anteriores, acceso a foros de discusión virtuales o elementos multimedia explicando los conceptos básicos a tener en cuenta. Se puede enviar un cuestionario que responda a las preguntas que hace el Gobierno a sus ciudadanos: ¿cómo crees que deberían modificarse las leyes de copyright, de modo que estos cambios lleven a una mayor competitividad, innovación y creatividad en el país?
Sin duda es una medida digna de aplaudirse, pues en vez de ver a los usuarios como criminales y hacerlos pagar con impuestos como el canon (¿verdad, SGAE?), mejor les piden su opinión para hacer una ley más justa. Ojalá mas gobiernos de otros países al reformar ese tipo de leyes tomaran en cuenta a los ciudadanos y no al interés de unos cuantos… ¿verdad RIAA?