Ya son ochenta años, nos lo recalcaron durante todo el evento, pero, ¿Y el evento? Olvidaron que es el suceso de espectaculos más importante del año, ni modo, nos vemos el siguiente año mi querido Oscar.
Pues bien, la noche del Oscar fue este domingo pasado, la ceremonia número 80, y a decir verdad, estuvo deslucida, desde el presentador, el cómico estadounidense John Stewart, que se esforzó mucho por meter chistes que no hacen reir a nadie.
En cuanto a la mejor pelicula, pues, se la llevo «No country for old men» o como es conocida en México «Sin lugar para los débiles«, con el mejor papel de Javier Bardem hasta el momento, un villano sin escrupulos, frio y violento. Éste mismo histrión español se llevó una estatuilla como mejor actor de reparto.
En Mejor actor, no había mucho de donde escoger, pero creo que se lo llevó quien debía llevarselo, Daniel Day Lewis, por el papel que hace en «There Will be Blood» o como será conocido en México, «Petroleo sangriento». A decir verdad, me decepcionó un poco esta entrega, porque no sentí que los nominados fueran grandes actores.
Espero que en próximas entregas la Academia realmente evalúe las producciones por el talento y no por el dinero invertido.
Creo que la academia tiene demasiado preestablecidos qué tipo de películas van a ganarse el Oscar. Lo único más o menos revigorizante de la noche fue ver a Juno en las nominaciones.
Y de hecho «Diablo Cuddy» se llevó una estuatilla por mejor guión.
Suena interesante esta película de Juno, pero no tanto por el guión de Cuddy, sino porque los actores que están en la cinta, son para mi los mejores cómicos del momento.
Si quieres buenas comedias, mira Supercool y Ligeramente embarazada.
Así es Superbad ( nombre original en inglés, según recuerdo) fue muy buena. Espero ver Juno en cuanto pueda.