Fallout 3, reseña

Tengo cerca de tres semanas jugando Fallout 3, quizá no intensivamente pero sí con mucho ahínco. Y me encanta. Es el juego que estaba esperando y creo que desquitará el dinero que me gasté comprándolo. Diantres, quizá hasta compre contenido descargable para él.

Bethesda se la voló en serio, les puedo asegurar que si les gustaron alguno de los juegos pasados de Bethesda (de la serie de The Elder Scrolls) casi tendrán por seguro que les gustará este. Aunque no sé cómo hayan estado los Fallout anteriores, pues no les tiré la garra encima, estoy seguro que es una experiencia bastante diferente.

Muchos alegan que Fallout 3 no es más Oblivion con un skin de holocausto nuclear… y tienen razón. Es el mismo motor (con algunos retoques y mejoras), los mismos controles, pero las mecánicas se han acomodado para que tengan coherencia con el mundo de Fallout. Y, digo, que sea un Oblivion con skin de holocausto nuclear no es tan malo después de todo.

La historia comienza así: Naces y creces en un refugio subterráneo anti-nuclear (llamados Vaults), el 101 para ser exactos. Y todo es hermoso, vives con tu papá, pues aprendes que tu madre murió al darte a luz. Vives varias etapas de tu niñez para que a los 19 años un día te despierte la hija del Overseer (el gobernador del Vault donde vives) diciendote que tu padre ha escapado del refugio, cosa que nadie ha hecho ni debería hacer y te aconseja que hagas lo mismo, pues los hombres de su padre vienen a tí para matarte.

Así es como buscas tu salida del Vault 101 y llegas a los Baldíos (Wastelands) que no es más que los restos de una Washington D.C. devastada por una guerra nuclear.

Déjenme les digo que el juego es dificil en sus primeras etapas, dado que no tienes ni dinero, ni comida y el armamento con el que cuentas (además de tus habilidades) harán que hasta una pelea con un perro rabioso sea una cuestión de vida o muerte.

Las gráficas son bastante buenas, con una distancia de vista bastante buena y una escenificación impecable e inmersiva. Buenas texturas y efectos de iluminación bastante decentes. Donde quizá flaquee un poco el juego sea en el modelado de los personajes, más no así en las secuencias de muerte que serán un festín para tus ojos. A lo mejor se sacrificó un poco de variedad en favor del ambiente, pues todo el paisaje que verás en los baldíos serán casas destruídas, un poco monónoto, pero bastante inmersivo.

La interfaz de usuario (o HUD o Heads Up Display) es austera, mostrando apenas un par de barras (de HP al lado izquiero y de AP al lado derecho), una brújula bajo tu barra de HP y un indicador de la condición de tu arma así como las municiones que tienes bajo la barra de AP. La barra de experiencia aparecerá de vez en cuando, y sólo cuando ganes algún punto de experiencia. Es impresionante como en este caso menos realmente es más.

En el apartado sonoro es bastante bueno, quizá los sonidos de las armas disparando sean algo blandas y la música sea casi imperceptible, pero cuando la ambientación sonora es requerida, cumple bastante bien.

Una de las adiciones más interesantes en Fallout 3 es el sistema VATs, el cual te permite utilizar los AP (o action points) para pausar el juego y dejar la perspectiva ya sea en 3ra o 1ra persona que tienes y entrar en una pantalla bastante «RPGesca» donde podrás seleccionar la parte del cuerpo de tu enemigo a la cual quieres atacar y las probabilidades que tienes de inflingir daño mostradas en porcentajes. A muchos les parecerá un apartado innecesario, pero para personas como yo que no son buenas para apuntar con los conotroles de una consola, será un salvador de vidas. Además que la manera en que el sistema dramatiza los golpes y las muertes es bastante entretenido.

Otra de las cosas que tiene Fallout 3 y que llaman la atención son los PERKS, que son habilidades que ganas cada nivel y que otorgan varios efectos muy útiles y otros bastante chuscos o curiosos. Por ejemplo está el de Bloody Mess que hace que cada que mates a un personaje tengas posibilidades que su cuerpo estalle en un mar de sangre y órganos, o el de Mysterious Stranger el cual te da posibilidades que cuando ataques utilizando VATs un misterioso pistolero aparezca a ayudarte con resultados mortales para tu enemigo. Claro hay otros que te hacen mejores con las armas de cierto tipo, más fuerte, más escurridizo, más hábil durante la noche o el día. Y la lista continua.

Una de las cosas que puede llegar a ser molesta, pero que resalta que el juego es más un RPG que un FPS son las armas, pues no son tan certeras como llegarían a ser en un FPS, además que la condición de cada una de ellas baje tan rápidamente hace que tengas que volver muy seguido a darles mantenimito para poder usarlas. Además que las municiones son bastante escasas.

Los baldíos donde se desarrolla el juego es un lugar bastante grande y colmado de lugares interesantes y tenebrosos. Cuando lleguen al refugio 112 y al 106 sabrán lo que les digo. Además de varias facciones muy interesantes como los Ghouls, el Enclave, La Hermandad del Acero (The Brotherhood of Steel) o La Familia.

Muchos por ahí se quejan de que el final no sea tan impactante como lo fue con Oblivion, concuerdo con ellos, pero eso no hace que el juego sea malo. Creo que más que el final, lo que vale la pena de Fallout es el trayecto desde que sales del refugio 101 hasta que terminas la historia, más que el final mismo.

Y como en acción: Lo malo, lo bueno y lo feo.

  • Lo malo: Es un Oblivion con tema del holocausto nuclear. Poca variedad de armas y enemigos.
  • Lo bueno: Es un Oblivion con tema del holocausto nuclear. Gran mapa por explorar, muchas locaciones interesantes.
  • Lo feo: El/los final/es.

Calificación 9/10